viernes, abril 29, 2005

Clases de sociabilidad. Lesson One: Direcciones.

Como indicar la dirección de un lugar si alguien nos pregunta.

Ej. 1: �Donde está la calle Torneros?

Siga recto y tuerza a la tercera calle en dirección a la Meca, luego en la siguiente manzana gire de nuevo hacia donde crece el musgo en los troncos de los árboles de las aceras y continue dos calles más abajo siguiendo la ruta imaginaria que trazaría una hipotética estrella de los Reyes Magos de Oriente en Navidad. Llegará a una encrucijada, entonces, guiese por el olor a pan hasta llegar delante de una pastelería dos esquinas más abajo, ahí, desplazandose tangencialmente, como lo haría un álfil, dejese llevar por la inercia de la pendiente de esa calle. Acuerdese de frenar justo un momento antes de estamparse contra la pared y en esa posición extienda los brazos y vaya en la dirección hacia donde señala la mano con la que suele coger la cuchara, si entra dentro de la menor posibilidad de que esa mano sea la izquierda, no se preocupe y siga esa dirección, porque si de verdad es usted zurdo, entonces, estará en otro lugar. A partir de ahí siga veinte pasos adelante, quince a la derecha, tres más al frente y la X marcará el lugar donde está escondido el tesoro. No lo desentierre. Recuerde que tiene prisa, en vez de eso debe mirar al cielo y seguir la dirección de las aves migratorias que en esa zona y época del año cruzan por ese lugar, eso durante aproximadamente los siguientes dos minutos, a partir de ese momento, camine dos pasos cada segundo siguiendo la dirección que marca la saeta de los segundos en su reloj. Ese recorrido curvilineo le salvará de ser arrollado por el tráfico y le hará llegar a una rotonta, a partir de la cual ya sería recomendable el uso de un sextante, en caso de no poseer ninguno empiece a correr intentando perseguir su propia sombra, eso si se trata de una hora Post-Meridian, si es After-Meridian intente huir de ella. Si consigue despistarla, habrá llegado, si no, procure orientarse de nuevo, dirijase a la esquina más próxima y haga pipí: a donde cae el chorrito es el suelo, la parte contraria es el cielo y vuelta a empezar.

martes, abril 26, 2005

Día del libro sin libro.

Un calendario sin més de Abril, un diccionario sin la palabra amor, un vademécum sin arritmias cardiovasculares, un camasutra sin página 69, una biblia sin magdalenas, un obituario sin muertes de placer, un listín telefónico sin teléfono de la esperanza, un átlas sin el país de nunca jamás, un Quijote sin mancha, un piscator sin días de tormenta, un diario que nunca hablaba de tí.

¿Quien me ha robado el més de Abril?

martes, abril 19, 2005

Eva y/o Eva.

Eva de quita y pon, Eva a sol y a sombra, Eva de cal y de arena, de mar o montaña, de carne y hueso, de sal y pimienta, Eva a todo o nada, Eva a cara o cruz, Eva de usar y tirar, sin ton ni son, Eva de hola y adiós, en blanco y negro, Eva ni sí ni no, ni pa tí ni pa mi, Eva de aquí para allá, con gas o sin gas, a capa y espada, contra viento y marea, en cuerpo y alma, en punto y coma, Eva aquí y ahora, Eva de ayer y hoy, Eva hoy y siempre, Eva ahora o nunca.
comeme

lunes, abril 18, 2005

La tristeza de una cama vacía al despertar.

El hueco del ascensor acurrucado en el lado izquierdo del somier, colchón que aun recuerda el molde de tu cuerpo y podría fabricarte en serie para la posteridad. Pero ahora no estás y con el espacio vacío que dejas en mi cama puedo edificar una urbanización de chalets con jardín y piscina, sentir la agorafobia en medio de un desierto de sabanas y al amanecer te busco entre las dunas con mi brazo sin encontrarte y no quiero abrir los ojos, prefiero seguir soñando que todavía estás.
Aunque despertarte solo en una cama vacía tiene sus ventajas ya que puedes tirarte el Gran Pedo de Hiroshima del Despertar.
Consecuencias a posteriori: reverberación acústica, grietas en la pared, destrozos en el mobiliario, éxodo de vecinos, aumento de la polución, efecto hinvernadero, cambio climático, periodo antidiluviano, extinción de algunas especies. Aumento de la actividad sísmica, nacimiento de una falla en el subsuelo de la habitación, desplazamiento de placas tectónicas, terremotos, maremotos, tsumanis, despertar de volcanes, aparición súbita de un nuevo continente. También, aceleración del eje rotatorio de la tierra, desplazamiento brusco de la órbita solar, aumento del polvo intergaláctico, aparición espontanea de nuevos agujeros negros, alteración del continuum espacio-tiempo, crisis cósmica, advenición del armaguedon, desaparición del universo tal como lo entendemos.

sábado, abril 16, 2005

Salpimentado y listo para zarpar.

A la deriba de un jacuzzi, engañado como un caracol, hubieran podido cocerme y no me habría dado cuenta. Parece ser que a mi, como a las langostas, nos gusta que nos hierban vivas.
Y siempre ahí en medio, jacuzzi, los japoneses intentando reordenar el mundo para hacer de este un lugar más placentero, mezclando elementos de difícil reconciliación (agua-aire) en busca del grial de una nueva coca-cola. Del feng-shui de unos calcetines, al origami de crear mundos ficticios a partir de un papel. Entonces, el arroz tres duricias de la vida se pasa, ya todo es nostalgia recordando esos anegados campos de espigas de arroz, tan cosechable, tan grano engendro de vida, guarecedor de hambrunas, portador de hidratos de carbono, de fibra, de fécula y del sueño de un futuro mejor, aun a pesar de yubitsumes, harakiris, tsumanis o del mismísimo sushi.

martes, abril 12, 2005

Vidas paralelas tienden a infinito sin juntarse jamás.

Nuestras vidas separadas por la barra de "Próximo cliente" en la cinta mecánica de la caja del supermercado, pedaleando paralelamente hacia ningún lugar en la bicicleta estática del gimnasio, nuestros ascensores se cruzan a la altura del entresuelo y en aquel paso cebra que nos dedujo, a ti semáforo en rojo, a mi peatón en verde y viceversa, ahí también te amé. Cuando yo elejía mar, tu elegías montaña, si tu alargabas la noche, yo tenía que madrugar, si contemplabas el cielo, yo encontraba una moneda en el suelo, si yo miraba el horizonte, tu te ponías a estornudar. Si yo me hubiera hecho minero, tu te habrías convertido en astronauta. Separados por una coma en la lista de espera del dentista, caminando en paralelo hacía ningún lugar en la cinta mecánica del gimnasio, nuestros trenes se cruzan a gran velocidad a la altura de una estación sin parada y también te amé en ese reflejo borroso que rozó el cristal.

lunes, abril 11, 2005

Conversaciones entre el mudo, el ciego y el sordo que está de espaldas II.

El mudo preguntó la hora haciendo un ademán de comprensión universal consistente en dar ligeros golpecitos con el dedo indice sobre la muñeca de la mano contraria. El ciego, a pesar de ser parte evidente del universo, no llegó a descifrar ese mensaje pero al oir pasar un insecto por delante de su rostro intentó atraparlo con la palma de su mano. El mudo, commocionado, supo en el acto que su amigo el ciego acababa de atrapar una hora, la que fuera, y a través de ese gesto se desmoronaba el tiempo a sus pies. A partir de ahí ya no se podía llegar tarde a ningún sitio y la vida era un frenesí, más aún viendo al sordo que está de espaldas bailar una danza étnica con paculiar estilo.

jueves, abril 07, 2005

Introspectiva.

Soy un encefalograma plano con la linea del horizonte, una resonancia magnética con la pantalla del televisor respecto del vello de mi brazo, la copia de seguridad de mi mismo en el registro civil por si me pierdo, el patrón de busqueda de mis rasgos faciales a través de una rinoplastia visual, el itinerario vasculante de un buscador de petrolio en las cargas de tinta de los bolis, de un buscador de diamantes en minas de grafito, soy todos mis pelos caidos al suelo, abandonados a su suerte en el lavamanos de un baño, soy el recopilatorio exhaustivo de todos los buenos días, buenas tardes, buenas noches, soy mi hermano gemelo no nato, la voragime de espermatozoides que murieron exhaustos el día que fecundé un óvulo, soy el perfil psicológico del escritor en serie, soy el abajo firmante del contrato de usufructo de un planeta azul, soy la depuración del ciclo del agua en el drenaje de mis riñones, soy la nostalgia de mi mismo justo la semana después de mi muerte, soy el olor a capela del vaho de mis zapatos, soy la radriogafía de tus pezones en mi mirada, la crosta de mi fricción con el mundo en mi rodilla, el virus patógeno mutante que anida en mis entrañas, la pausa de silencio entre mi nombre y mis apellidos, el vagido de un pote de conservas abierto por el elegido después de superar la maldición etrusca del precinto de la tapa.

martes, abril 05, 2005

Usos anormales de la escobilla del wc.

- Exfoliarse la piel raspando con sus puas.
- Remover el estofado con ella.
- Presentarla a las visitas como un miembro más de la familia.
- Venerarla.

viernes, abril 01, 2005

Esclavo.

De tu tabique nasal maestro, de tus talones de aquiles de cristal de bohemia, de tu huesito de la alegría de la tristeza, de tu pie izquierdo de levantarte, de tu flequillo trotante caballito de mar de Troya, de tu xilofón de premolares en invierno, del fruto húmedo de tu nuez, de la raíz cúbica de tus cabellos, del km/0 del mundo en tu ombligo, -y cuando me la chupas siempre pienso que me vas a morder, quizá porqué yo suelo desear hacerte una ablación de clítoris con los dientes-, de tus parpados blindados con apertura retardada, del rompenueces de tus ingles, del angulo de 181º de tus esquitiviales en el momento en que, del menú de uñas de tus pies, de tu hombro impermeable y antihumectante, del secreto del alquimista en la química de tus axilas, del reflejo de mi silueta en tu ojito derecho, del museo de cera de tus orejas, del purgatorio de tu espalda, del nido de culebras de tu coño, del cementerio de elefantes de tu ano, de la erección repentina de un escalofrío en tus pezones, del punto de sal en tu lengua, del callejero de Roma en la palma de tus manos, del escrutinio final de pestañas en tu mirada, -porqué cuando te sodomizo siempre pienso que vas a defecar, tal vez, porque siempre he querido cagar en tus manos-, de tus muñecas de porcelana desarticuladas, del lenguage binomial concavo/ convexo de tus cejas, del laberinto sin Minotauro de tus huellas dactilares, de la arritmia cardiovascular de tu dedo corazón, de la punta de silex afilada de tus codos, del encofrado curvilineo de tus caderas, del escondite de ladrones de besos de tu cuello, del periodo antidiluviano en el recorrido que va desde tu ante brazo hasta tu clavícula, - aunque cuando te beso siempre creo que vas a vomitar, quizá porqué siempre he querido alimentarte como un pajarito y reburgitar en tu boca-, de la alopecia lijada de tu vello púvico, del eclipse de armaguedon de tu pupila, de la vera de tu cocsis de los que zarpan al amanecer, de un continente recien descubierto cuando hincas tus rodillas, del listín de telefonos escritos en tu frente, del desnucamiento de hemisferios cuando giras tu cabeza, del cartelito de abierto las 24 horas de tus piernas -porque cuando te follo siempre creo que me vas a asesinar quizá porqué cuando hacemos el amor siempre pienso que te voy a matar y hay un momento en que estoy convencido de que vamos a morir los dos.