lunes, abril 16, 2012

Muriéndonos de a poco.

Voy a morir, lo se ¿tu lo sabes? Que un día las cuencas de tus ojos albergarán gusanos dándose el festín del manjar de tus pupilas, que quizás morarás debajo de la tierra dentro de un ataúd de madera, quien sabe, si tu muerte será plácida en la cama o violenta por accidente de tráfico o bomba nuclear, da igual, lo único seguro es que has de estar muerto algún día, tal vez muy pronto o quizá dentro de mucho tiempo pero en cualquier caso cada vez más cerca a cada segundo que pasa, que importa, si la muerte y tu seréis una única cosa hierática e inexistente que apena a los seres queridos y a ti ni te afecta porqué ni te das cuenta de que estás muerto, de que has muerto, que más da, si ni tan siquiera ya no sientes nada si es que algún día llegaste a sentir alguna cosa, parece, que ni padeces ni te alegras y tampoco eres capaz de pensar porqué tu cerebro ya no va y ya no eres nada, que importa, ni tan solo ese vacío que se expande a través de todo aquello que no alberga vida alguna y a lo que un día miraste con prepotencia y desdén creyéndote mejor por poder respirar, sentir, pensar, saber distinguir entre lo que es y no es que ahora te vence para volverte átomos que componen un ser muerto en esa apoteosis de la nada en que te has convertido, a no ser que siempre hubieras sido eso y nada haya cambiado aun, ni haya de cambiar jamás, ya ves.

No hay comentarios.: