sábado, mayo 27, 2006

Hábitos de lectura o como comportarse ante la literatura.

Según el dios de la literatura, estar leyendo un buen libro y tenerlo marcado en alguna de sus páginas augura immortalidad. Nadie puede morir dejando a medias una historia.
En cambio, cuando alguien te cuenta el final de un libro o de una película que no has visto, en algun remoto confín del universo estalla una estrella.
Si mientras lees un libro se posa un mosquito sobre él, debes cerrar el libro de un golpe brusco y aplastarlo. Ese mosquito fue un antepasado tuyo y te está indicando que desea ser trasladado a su siguiente reencarnación. En la que será escritor.
Hay un libro que nadie puede resistirse a cogerlo del estante después de leer su título, se trata de: "Palanca de apertura del pasadizo secreto".
Un libro triste, verdaderamente triste, debiera ser siempre editado en papel de cocina mega-absorvente. La buena literatura erótica, por contra, debería leerse exclusivamente en Brailly. Con las tapas debidamente plastificadas para evitar embarazos psicológicos.
Un libro que has comprado con tu dinero, no debes dejarlo nunca a nadie. Lo más provable es que no te lo devuelvan.
Si eres la persona a la que le han dejado el libro, no lo devuelvas. Así aprenderán.
Al leer un libro cuyo autor haya muerto, siempre tendrás la sensación de que su fantasma está leyendo justo por encima de tu hombro derecho asomandose como el lorito de un pirata. La única forma de que desaparezca esa sensación será desnudarte y meterte en la ducha, cuando vuelvas su presencia ya no estará allí.
Si mientras estás leyendo un libro hay un apagón, deberías renunciar a leer el final de esa historia. Tendrás que imaginar finales alternativos durante el resto de tu vida. Y solo en tu lecho de muerte gozarás del derecho de saber si en alguno de ellos coincidiste con el del autor.
Si, en cambio, lo que ha sucedido es que has estado tan immerso en la lectura que se ha puesto el Sol y ya no puedes seguir leyendo, no deberías corromper ese libro con luz artificial. Enciende una vela o espera a que vuelva a salir el Sol.
Pudiera suceder que te identificaras mucho con el/ la protagonista de un libro o vieras demasiadas coincidencias entre la historia que se explica y la de tu vida. En ese caso, alza la vista y mira a tu alrededor, a ver si hay alguien mirando de reojo mientras toma apuntes en un bloc.
También debes saber que en cada hueco en blanco hay una frase que jamás se escribió.

De la relación con un libro.

Para leer un libro: antes que nada, huelete las manos ¿crees que son dignas de ni tan siquiera sujetar las tapas? De todas formas, lávatelas. Aunque lo ideal sería que usaras guantes de latex. Además de tratarse de otro sistema anticonceptivo para evitar embarazos psicológicos dermatológicamente testado.
Ahora ya puedes sujetar el libro, primero que nada huelelo por la parte del lomo como si fuera un puro. El sentido del olfato resulta esencial en estos primeros compases, la atracción química olfativa, tan importante en el amor, también lo es en la literatura y, a efectos prácticos, podemos considerar que vas a hacerle el amor a un libro; bueno, de momento, que vas a follartelo, luego, a lo mejor, surge algo más.
Los prolegómenos son muy importantes: no puedes abrirlo e introducir tu mirada de sopetón, primero deberás acariciar su contraportada, besar el titulo y susurrar en voz baja el nombre del autor. Luego, hazle cosquillas jugando a hacer deslizar los pliegues de sus hojas suavemente por tu dedo pulgar. Ahora sí, con la excitación pertinente, ya puedes abrirlo y penetrarlo con tu lividinosa mirada.
Acuerdate de humidificar regularmente tus dedos con saliba para cambiar de página, los fluídos corporales serán muy importantes para que todo se desarrolle de forma lubricádamente correta. Ve a tu ritmo, recuerda que la buena lectura dura horas. De esta forma, cuando llegue el clímax todo se precipitará en un orgasmo que hará que se corra la tinta del punto final.

4 comentarios:

Unknown dijo...

maravillosas indicaciones, pero creo que solo las seguiré con tu novela, cuando se publique.

Imposivle dijo...

es todo verdad, más adelante explicaremos como hay que llevar a pasear el libre, decirle que le quieres, comprarle una estantería nueva, etc...
además de que hacer si de vuestra relación nace algun tríptico o pamfleto.

Unknown dijo...

me gusta lo de "llevar a pasear el libre" aunque sea una errata, o una rata.

Unknown dijo...

espero que lo edites, y lo siento por los árboles pero sería mucho más manejable leerte tumbada... y por favor no le metas publi, yo pago el libro.