Yo te quise. Te he querido. Te hubiera querido. Te querría. Y, tal vez, te querré. Y, luego, te habré querido. Y ojalá te quiera. Porqué te quería. Porqué te hubiese querido. Y te quería querer. Y quisiera quererte querer.
Pero no te quiero.
(Tú, quiéreme. Y sigue queriéndome.)
2 comentarios:
el amor es un engaño, a veces creo que queremos al otro porque en él vemos algo de nosotros que nos gusta, pero reflejado hacia fuera
estoy de acuerdo, aunque a veces valga la pena dejar engañarse
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